"...Los chinos repiten un antiquísimo refrán: “Usted tiene todo el tiempo que hay”. En efecto, no hay más tiempo que “el que hay”. El tiempo “está ahí”, como un pentagrama vacío, esperando que coloquemos en él las notas musicales de nuestras vidas. Cada persona “divide” y usa el tiempo según su sentir y necesidades. No es cierto que el tiempo “no alcance”; lo que no logramos hacer el lunes, tal vez consigamos hacerlo el martes; la cuestión es proponérselo. Quizás sea correcto decir del dinero: “nunca alcanza”. Pero no del tiempo. Este último es “un continuo” de luz y sombras, noches y días, que ni siquiera el reloj es capaz de agotar.
No entraremos en abstrusas disquisiciones acerca del espacio-tiempo. Digamos, a contrapelo de los físicos, que el tiempo “es absoluto”, no relativo; que las células de nuestro cuerpo envejecen con “el paso del tiempo”, de manera “absoluta”. ¡Hagamos lo que hay que hacer! ¡Envejeceremos, inexorablemente! Personas con muchísimas ocupaciones, sociales y de negocios, “encuentran tiempo” para llamar a sus amigos el día de sus cumpleaños; y para divertirse, viajar, leer o descansar. Disponen “del tiempo que hay”; y lo reparten a su manera.
“Cronos” es una divinidad de la mitología griega que “preside” el tiempo. En la antigüedad se le relacionaba con las cosechas, con la “supervisión de los cultivos”. Las vidas de los individuos son parecidas a las estaciones del año: tienen primaveras y otoños; etapas de sembrar y épocas de cosechar. El tiempo se encarga de reducirnos a polvo. Tuve un amigo que siempre argüía “no tener tiempo”. Falleció hace un año. Para morir “encontró tiempo”. Dejó “sin hacer” muchísimas cosas que “le hubiesen gustado”. "
http://www.hoy.com.do/opiniones/2010/4/15/321818/A-PLENO-PULMONEl-tiempo-apremia
Cronos
Fue uno de los doce Titanes, el hijo menor de Urano y Gea, que personificaban el cielo y la tierra. Tuvo muchos hermanos, entre los que estaban los tres Hecatonquiros, monstruos de cien manos y cincuenta cabezas a quienes Urano había apresado en un lugar secreto. Gea trató de rescatarlos y pidió ayuda a sus otros hijos, incluidos los cíclopes, pero sólo Cronos acudió en su defensa venciendo a Urano, a quien castro con una hoz, y convirtiéndose en el gobernante del universo.
Cronos se caso con su hermana Rea, para evitar que los hijos que nacían de ese matrimonio pudiesen sustituirle en el gobierno del mundo, los devoraba a medida que iban naciendo. Pero al nacer Zeus, Rea le dio a Cronos una piedra envuelta en pañales y escondió a su hijo en Creta. Ya crecido, Zeus se haría con el trono de Cronos, arrojando a su padre del Olimpo. Cronos huyó al Lacio donde fue bien recibido por el rey Jano, enseñando a su pueblo la agricultura. Tuvo amores con Filia, a la que poseyó transformado en caballo, de estos amores nació el centauro Quirón.
Era el dios del tiempo, del sol y de las cosechas. Se le representa como un viejo descarnado, triste y seco que lleva en sus manos una guadaña que indica que el tiempo lo destruye todo. En Atenas le consagraron un templo cerca de la Acrópolis. También tuvo templos en Elida y Olimpia y en Roma tenía uno situado al pie del Capitolio, en donde se encontraba el tesoro público. Se le identifica con el dios romano Saturno.
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