Aceptarnos como seres únicos, interiorizar la idea de que, “solos venimos y solos nos vamos” de que nada es nuestro, de que de nadie somos, de que es tan breve y frágil la vida , no nos permite perder el tiempo en deseos o en carencias, si no valorar lo que ya somos y tenemos.
Se presentan oportunidades en la vida de conocer otros seres humanos que durante un tiempo nos acompañan, nos guían, nos encaminan, nos protegen. También personas que nos hacen valorar el dicho que dice “mejor solos que mal acompañados”.
La vida tiene valor en sí. No es la soledad o la compañía lo que le da ese valor. Hay personas acompañadas que a la vez, están muy solas y hay personas solas, que a su vez están muy acompañadas. En la soledad habita la belleza de reencontrarse, de reinventarse, de recomenzarse, de valorarse, de amarse. En la soledad hay paz, hay quietud. Tememos a la soledad porque nos hace oír nuestra propia voz. Porque nos muestra tal y como somos mas , una vez alcanzado ese sentimiento de estar a gusto con uno mismo, de saber encontrar asombro en las cosas simples que nos rodean, de saber apreciar el valor de los demás , la voz de los demás , los sentimientos de los demás , el silencio de los demás y de reconocer y apreciar y cultivar nuestra riqueza interior… entonces nos convertimos en la mejor compañía que podamos tener.
Existe compañía en cualquier lugar. No sólo en nuestra intimidad. Hay compañía en los libros, en las obras de arte, en la música! Hay compañía en las miradas, en las voces, en los intercambios de ideas. Donde nunca habrá compañía es en la soberbia y el egoísmo. Ellos tampoco forman parte de la soledad, sólo son la parte más oscura del ego del hombre.
Muchas veces interpretamos como soledad una situación de mal porvenir , de mala racha profesional o un sentimiento de desaliento. El estar carentes de buena salud, también nos hace percibir esa sensación de miserables y de soledad maldita. Y no, no es así. La riqueza , el amor , la compañía habita dentro de nosotros, así como la paz que se necesita y la compasión, que acaricia nuestras ideas y afectos, y nos hace rebosantes aunque en nuestro lecho, o en los pasillos de nuestra casa, se vea un solo cuerpo y se escuche una sólo una voz.
Sonata
La soledad es el hecho mas profundo de la condición humana. Octavio Paz
¿Por qué, en general, se rehúye la soledad? Porque son muy pocos los que encuentran compañía consigo mismos. Carlo Dossi
En la soledad no se encuentra más que lo que a la soledad se lleva. Juan Ramón Jiménez
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